Día 38.
Hoy sin duda me ha hecho sonreír que mi hermano, recién sacado el carnet de conducir, me haya llevado al entrenamiento ahorrándome mis dos horas diarias de transporte público. Da gusto ir en coche, ya casi se me había olvidado lo que era ir escuchando la radio, no hacer transbordos, esperar los cinco minutos que tarda en llegar siempre el metro...